¿Cómo queremos ser recordados?

Ninguna persona muere mientras sea recordado en el corazón de quienes lo aman. Psicólogos y psiquiatras expertos aseguran que recordar escenas agradables con aquellas personas que ya no están, tiene un impacto fuerte en el cerebro ya que al momento que sucede el recuerdo, se producen las mismas sustancias y se activan las mismas zonas cerebrales que se activaron cuando sucedió en realidad. Teniendo esto presente, una de las preguntas más frecuentes es ¿cómo queremos ser recordados?.

Excepto para algunas personas a quienes les tiene sin cuidado cómo serán recordados cuando mueran, para la mayoría, dejar un legado significativo, impactante e incluso transformador se convierte en un propósito de vida que impactará las futuras generaciones. 

Un duelo puede ser uno de los eventos más catastróficos y devastadores que puede vivir una persona, trayendo una combinación de desesperación, impotencia y miedo. En medio de la tristeza y el dolor, los detalles y recuerdos que tenemos del ser querido parecen imborrables, sin embargo, con el paso del tiempo y el avance en el desarrollo del duelo, esa nitidez se va perdiendo. 

Es frecuente que a medida que pasan los meses, el temor más grande de familiares y amigos sea el olvido de esa persona, e incluso, malinterpretan el proceso del duelo como uno que finaliza cuando se olvida al ser querido, impidiendo vivir un duelo adecuado. Pero, ¿realmente se puede llegar a olvidar al ser querido? La respuesta es no, incluso si así lo quisiéramos. 

El temor a olvidar hace que las personas se aferren al dolor, bloqueando el afrontamiento del duelo e impidiendo desarrollar sentimientos sanos y constructivos hacia la persona que no está y hacia los que quedan. El objetivo del duelo es el recuerdo tranquilo que permite honrar la memoria del ser querido que no está, manteniendo viva la relación a pesar de su ausencia. Conoce los talleres de apoyo psicológico con expertos en manejo del duelo de memorias.com.co

Recuerdos: una narrativa que se construye entre todos

Recordar y mantener vivos los bellos momentos y también los no tan buenos (a modo de aprendizaje), es lo único que queda luego de la partida de un ser querido.

Psicólogos expertos en el manejo del duelo señalan que la pena involucra procesos mediante los cuales se encuentran, se apropian o se ensamblan los significados entre las personas que comparten sus experiencias como dentro de ellas mismas. 

Es natural que después de la muerte de un ser querido busquemos un sentido, un significado y a menudo coincidamos con otros familiares y amigos sobre lo que debió haber sido la vida del ser querido. La reconstrucción de esa narrativa que se construye entre todos es uno de los objetivos del duelo y en ocasiones, uniendo las experiencias vividas de cada uno con la persona fallecida, esta narrativa resulta creativa y hasta con algunos detalles imaginativos. Contacta con el equipo de psicólogos expertos de memorias.com.co y recibe acompañamiento para un manejo adecuado del duelo. 

Creando recuerdos significativos

Si acaso pudiéramos controlar lo que se dirá de nosotros cuando no estemos, ¿lo haríamos?, claramente es algo que no podemos hacer, sin embargo, sí es cierto que tenemos diferentes maneras de dejar recuerdos significativos en la vida de otros e incluso intentar ser recordados como quisiéramos. 

Actualmente, internet, redes sociales, blogs, entre otros, están a disposición de todas las generaciones y sin darnos cuenta, o incluso siendo intencionales, las personas dejan una huella de su historia de vida, que de seguro, será una de las fuentes de información, recuerdos y homenajes cuando llegue la muerte. 

No obstante, también existen otras maneras de aportar una visión propia de quien fuimos al futuro relato que será contado: 

1. Escribir la propia historia. Nadie más puede escribir mejor la historia de vida de una persona, que la misma persona. Solo sus propias perspectivas y experiencias podrán ser narradas con la pasión con que fueron vividas. 

Pensando en dejar un legado que sea recordado por las siguientes generaciones, una idea que resulta especial para amigos y familiares es dejar escritos físicos o notas digitales que recuerden momentos relevantes de la vida, incluyendo un repaso de experiencias con personas especiales y aprendizajes importantes. 

1. Revivir historias con ayuda de otros. En ocasiones, sobre todo cuando ha llegado la vejez, recordar hechos del pasado resulta difícil, sin embargo, es increíble como la memoria puede llegar hasta lugares profundos en medio de una conversación agradable. 

Añadir a esto la posibilidad de hacer una grabación de la conversación, será una manera de preservar, no sólo las palabras, sino también los sonidos, los silencios, y hasta las expresiones. 

Hacer una caja de recuerdos. Es común en procesos de duelo hacer uso de esta herramienta, como una manera de sobrellevar la partida de un ser amado. Sin embargo, sabiendo que algún día la muerte nos llegará a todos, hacer una caja de recuerdos en vida, permitirá elegir intencionalmente aquellos elementos que en realidad describan a la persona o que sean útiles para dejar un mensaje relevante.